Polonia (Campo de concentración de Auschwitz , Cracovia, Wroclaw)

Hace tres semanas, en plena Eurocopa, hicimos un viaje a Polonia con Brais y Noela. Fue un viaje de fin de semana, intenso pero muy interesante.

Ruta en Google Maps

Auschwitz

Salimos el sábado muy temprano, a las cinco de la mañana,hacia el campo de concentración de Auschwitz, pues queríamos llegar al tour en castellano de las diez. Por supuesto a las 5 de la mañana ya hacía bastante sol, aún así Noela y Kipar fueron durmiendo todo el camino, y el resto, dormimos a ratos.

Llegamos a tiempo y compramos los tickets para hacer el tour en castellano. Kipar no podía entrar así que dejamos el coche bajo una arboleda y le dejamos las ventanas algo abiertas.

La señora encargada de hacernos el tour era muy buena guía, pero extremadamente seria, tal vez, por trabajar donde trabaja.

La visita duró desde las 10 hasta las 14, visitamos ambos campos Auschwitz I y Auschwitz II. La verdad que nos contaron historias aterradoras, mucho más de lo que uno imagina, de lo que haya leído o visto en películas. Nuestra sensación en esta visita no se puede explicar con palabras, ni se puede decir que sea una visita bonita, pero sí es una visita que impresiona y te emociona. Aquellos escenarios que alguna vez hemos visto en fotografías antiguas, los barracones que nos muestran en las películas, las vías de tren en los cuáles traían a cientos y cientos de judíos hacinados, todo eso estaba allí y era real. No era ficción. Casi intacto. Indescriptible. Aquello nos impresionó tanto que practicamente no nos hablamos en todo el tour, es más, había cientos de personas haciendo el tour en el mismo idioma y solo se escuchaban las voces de los guías.El silencio era para ponerse el bello de punta.

Realmente ni nos apetece contar en detalle las barbaridades que allí se cometieron, aunque pensamos que toda persona debería de visitarlo, pues creemos que es la única manera de que algo así no se vuelva a repetir, y sirve de reflexión para todo ser humano. Os dejamos algunas fotos.

Cracovia

Más tarde, tras comer unos bocadillos que llevábamos seguimos para Cracovia, que quedaba tan solo a media hora. Llegamos y nos fuímos para el hotel. El hotel estaba en la calle más centrica de todo Cracovia. Sabíamos que estaba céntrico pero no tanto. Además solo nos costó 12 euros por persona con desayuno incluído. En muchas cosas, Polonia es muy barato.

Estuvimos toda la tarde paseando por Cracovia. Es una ciudad pequeñita, pero muy hermosa. Es de estas ciudades donde te gustaría vivir, porque tiene el tamaño perfecto para vivir, y a la vez tiene un centro muy bonito y agradable. La plaza central es muy particular pues es muy amplia pero tiene edificos en medio, como una torre o el ayuntamiento. También visitamos el castillo real, uno de los símbolos de Polonia.

El ambiente era ideal, pues estaba todo invadido por el trascendental partido que en unas horas disputaría Polonia contra República Checa, casualmente. Estuvimos muchísimo tiempo encontrando un bar donde pudiesemos ver el partido, pero estaban todos llenísimos. Al final conseguimos ver la segunda parte en un bar subterráneo enorme lleno de polacos. Nosotros queríamos que ganara Polonia, para así celebrar la fiesta con ellos, pero si ganaba República Checa también nos gustaba, pues era una fiesta futura, 🙂 y además nuestro país de acogida claro. Perdió Polonia y no tuvimos fiesta, unos días después en Praga veíamos perer a República Checa. Y en la memoria aún las dos finales perdidas por el Athletic. Después de esto nos han prohibido la entrada en la mayoría de países del mundo, por gafes.


Wroclaw

Al día siguientes salimos hacia Wroclaw, una de las sedes de la Eurocopa. Dimos un paseo por la ciudad y comimos allí, pero realmente nos defraudó un poco. La plaza central era muy bonita, pero fuera de ahí nada destacaba especialmente. Además casi todas las calles estaban valladas con Fan Zones, cosa que daba bastante ambiente pero que dificultaba un poco la visita.

Cascada Mumlavsku (Harrachov)

Después de comer partimos nuestro viaje hacia Praga, esta vez lo haríamos cruzando la frontera natural que marcan las montañas gigantes que es así como se le llaman, por ser las más altas de República Checa. En Harrachov, primer pueblo tras cambiar de país, fuímos a visitar la cascada Mumlavsku, que nos sorprendió gratamente.

Esta fue la visita que más disfrutó Kipar, aunque no lo dejamos bañarse, que es lo que realmente hubiese querido.

Nos costó trabajo encontrarla, así que dejo el lugar exacto donde dejar el coche si se quieren visitar:Aquí

Desde Harrachov tardamos dos horas más hasta Praga y terminamos nuestro viaje, que resultó realmente interesante.